lunes, 29 de mayo de 2017

Sobre el horizonte del río se puede ver cientos de grandes barcos quietos. Desde el espigón destruido parecen una ciudad. Conectada por tubos y sistemas electrónicos que mantienen la estructura en un movimiento estático. Desde la orilla parten familiares, curas y médicos. Cada cual a su turno llevan a cabo sus ritos alrededor de la ciudad. Las mujeres son amigas hace años; se toman las manos y se apoyan sobre el metal lleno de corales manchados por el agua de río, cantan en lenguas desconocías, así lo creen ellas. Otros rezan rosarios que se vuelven como mantras. Los últimos rituales, los del aceite, las unciones y las oraciones oficiales se mezclan con la música que llega por el viento desde la orilla de una parrilla al costado del camino. La ciudad flota conectada. Lo hará por tres días fiel a sus creencias. Después no hay certeza. Si la ciudad se hunde o se pierde flotando en el horizonte. Desde la orilla no es claro el movimiento.














viernes, 10 de abril de 2015

El libro de las Nubes







Algo se escapa de la mirada, flota lejos, frente a un país que vemos detrás del rio, en el horizonte, o en el borde biselado de un espejo. Estoy suspendido en este territorio, donde se desprende tu calor de mi piel. En tus diferentes colores existe una forma del vértigo, un país en ruinas.
Como el final de la noche, todo lo que hiciste se parece a un reflejo donde sonreís y yo robo ese gesto.






La respiración agitada, la claridad extraña del día nublado, una forma del vapor flota sobre los ojos. Hay un rio tumultuoso en ese detalle, la transpiración refleja la luz sobre la piel, contagia a la oscuridad que nos separa de la provincia.








Como un accidente natural afuera llueve y el día gris hace estallar los colores de las cosas, la herida en los labios. Años después sé que es como en mis sueños, el cielo y la piel como un claroscuro.









A tu paso los árboles se mueven como las nubes, abajo las vías quebradas, los durmientes juntos mis a restos, caen fuerte como una interferencia las distintas palabras que olvidamos.
Donde el dolor se disipa, la fricción de la piel y los fragmentos de cada gesto se pierden y se encuentran. Ahí en ese lugar, decís. En ese punto.
Tu perfume se desprende de mis dedos.






Cuatro horas protegidos por una lluvia que tapaba nuestra música, como una película vieja y vencida. Esta alteración es la forma de cifrar esa huella, lo blanco de la piel, la herida alta. Todo se deshace en las palabras que decís.
¿Recordas?
El camino que cruza la ciudad desde la curva donde me viste, el sol caía como el brillo que resaltaba los movimientos del viento sobre tu boca.




-Te arrodillaste para arreglarme la cadena y la trama se rompió como el dolor en el centro del cuerpo.
-Ese día no importaba nada más.
La calle vacía y el resplandor. Dijiste, es el destino, aunque sin pensarlo trabajabas con frases cortas para torcerlo. 










miércoles, 4 de marzo de 2015

martes, 15 de abril de 2014















                                  Lectura en Tecnópolis en el Encuentro Federal de la Palabra
                                                        en el marco de Festín Mutante
                                          Viernes 18 a las 18 en el Café Literario Puerta 11

lunes, 10 de febrero de 2014

el hombre que nació del bosque































































  
                                   


















                                   





























                         

























                         




























                           



























                            

























                           
































                           































                           





















































































sábado, 24 de agosto de 2013





Mary Ann Nichols pertenece a la serie de siete videos llamada "La Superficie del Silencio", realizados a partir de los siete poemas del libro Arena de María Eugenia López, de fragmentos del poema El Lenguado de José Watanabe y textos de Luis Marecos. 







                                                                      https://vimeo.com/72907778